Haití dio pasos entre desastres
Haití dio pasos concretos hacia su reconstrucción casi tres años
después del terremoto que destruyó Puerto Príncipe, y logró otros
importantes avances para la creación de un Estado de derecho, pese a los
efectos de los huracanes que, lejos de lo que provocó la tragedia del
2010, afectaron a un país aún demasiado vulnerable a los desastres
naturales.
Como no ocurría hace mucho, el país volvió a ser
también escenario de protestas de una parte de la población descontenta
con el gobierno del presidente Michel Martelly por no responder a sus
reclamos, en un año en el que el mandatario se mantuvo nuevamente
enfrentado al Parlamento y debió encarar una nueva espiral de violencia
causada por la delincuencia, los secuestros y el crimen organizado.
La
economía tampoco resultó en lo que se esperaba. Haití logró elevar en
54.6% los ingresos por la frontera e impuso sanciones a empresarios que
no habían cumplido con el pago de impuestos para mejorar la recaudación
fiscal, pero no pudo hacer nada para conseguir un crecimiento mayor al
2.5%, lejos de lo calculado a comienzos del 2012 cuando el Fondo
Monetario Internacional (FMI) anunció una una expansión del 7.8% este
año.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL)
atribuyó el pobre desempeño a una difícil temporada agrícola y a un
rezago en los esfuerzos de reconstrucción del país, “debido a una
recurrente crisis política que retrasó la ratificación del primer
ministro y al lento desembolso de recursos provenientes del exterior”.
La
desaceleración también se produjo por el paso del huracán Sandy y de la
tormenta tropical Isaac y por temporales menores que dejaron cerca de
un centenar de muertos, 250,000 afectados y pérdidas por más de 100
millones de dólares en la agricultura.
Además, una sequía mermó la
producción agrícola en el primer semestre del año, lo que sumado a los
desastres de la temporada ciclónica provocó que hasta dos millones de
personas, según la Organización de las Naciones Unidas, quedaran a
merced de la inseguridad alimentaria.
La situación fue tan
desastroza que a mediados de diciembre, la ONU dijo que Haití requerirá
144 millones de dólares para asistir a su población más vulnerable en el
2013.
Violencia
A las víctimas de las tormentas se agregaron las de la violencia, en una nueva espiral de violencia provocada por el secuestro, la delincuencia común, el narcotráfico y el crimen organizado, que dejó en promedio casi un centenar de víctimas por mes.
A las víctimas de las tormentas se agregaron las de la violencia, en una nueva espiral de violencia provocada por el secuestro, la delincuencia común, el narcotráfico y el crimen organizado, que dejó en promedio casi un centenar de víctimas por mes.
La actual situación fue denunciada a mediados de año por la
ONU, cuando aseguró en un informe, el secretario general de la
organización, Ban Ki-moon, que luego de algunos meses de estabilidad la
inseguridad ha aumentado de nuevo en el área metropolitana de Puerto
Príncipe. Entre las víctimas se contaron hasta una docena de policías,
ex funcionarios públicos y respetadas personalidades del país, aunque al
final de año las fuerzas del orden capturaron a Clifford Brant, hijo de
un magnate haitiano y miembro de una de las familias de mayor abolengo
en Haití, al que acusaron de liderar una peligrosa banda de
secuestradores.
Militares y logros
Entre tanto, exintegrantes de las Fuerzas Armadas de Haití que reclaman viejas deudas del Estado, se hicieron notar en varias ciudades del país hasta que fueron detenidos en una gigantesca operación en mayo, el mismo mes en el que el presidente Martelly celebró su primer año en el poder con la ratificación en el Parlamento de Laurent Lamothe como su nuevo primer ministro, tres meses después de la renuncia a cargo de Garry Conille, ex funcionario de la ONU.
Entre tanto, exintegrantes de las Fuerzas Armadas de Haití que reclaman viejas deudas del Estado, se hicieron notar en varias ciudades del país hasta que fueron detenidos en una gigantesca operación en mayo, el mismo mes en el que el presidente Martelly celebró su primer año en el poder con la ratificación en el Parlamento de Laurent Lamothe como su nuevo primer ministro, tres meses después de la renuncia a cargo de Garry Conille, ex funcionario de la ONU.
El gobernante haitiano, que fue llevado de
emergencia a Estados Unidos en abril para ser operado por una embolia
pulmonar, tuvo además que presentar públicamente sus documentos de
identidad para demostrar que está habilitado para ocupar el cargo, lo
que facilitó el diálogo con los mismos legisladores que lo habían
sometido a una investigación en represalia por el apresamiento de un
diputado el año pasado.
Entre otros logros, Haití pudo estrenar
en el 2012 una nueva Constitución que introdujo importantes reformas
como la doble nacionalidad, aunque fue criticada por un artículo
relacionado con la elección del primer ministro; estableció un nuevo
Consejo Superior del Poder Judicial (CSPJ), posesionó a un nuevo jefe de
policía y avanzó, a finales de año, en la conformación de un Consejo
Electoral Permanente, que no pudo, sin embargo, convocar a elecciones
parciales como se había programado a principios de año.
Otros logros
Haití redujo de un millón y medio en el 2010 a 360,000 en el 2012 el número de personas que viven en campamentos para damnificados del terremoto de hace casi tres años, y avanzó sustancialmente para cambiar la fisonomía de su destruida capital, pese a que el gobierno haitiano consideró que aún faltan 12,000 millones de dólares para consolidar la reconstrucción nacional iniciada el año pasado.
Haití redujo de un millón y medio en el 2010 a 360,000 en el 2012 el número de personas que viven en campamentos para damnificados del terremoto de hace casi tres años, y avanzó sustancialmente para cambiar la fisonomía de su destruida capital, pese a que el gobierno haitiano consideró que aún faltan 12,000 millones de dólares para consolidar la reconstrucción nacional iniciada el año pasado.
Por otra parte, el gobierno del
presidente Michel Martelly lanzó un programa contra la pobreza extrema
con un fondo inicial de 13 millones de dólares para el primer año, e
inauguró su primera planta de tratamiento de aguas servidas, un signo
del desarrollo y el progreso del que hasta hace poco carecía el país más
pobre del continente.
PROTESTAS EN EL PAÍS:
A pesar de los avances, en el segundo semestre del 2012 se empezaron a registrar decenas de protestas contra el gobierno del presidente Michel Martelly, la inseguridad ciudadana y el alto costo de la vida, y en rechazo a la presencia de la Misión de la Organización de las Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (MINUSTAH), que mantuvo su cronograma de retiro parcial a lo largo del año, anunciado en octubre del 2011.
A pesar de los avances, en el segundo semestre del 2012 se empezaron a registrar decenas de protestas contra el gobierno del presidente Michel Martelly, la inseguridad ciudadana y el alto costo de la vida, y en rechazo a la presencia de la Misión de la Organización de las Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (MINUSTAH), que mantuvo su cronograma de retiro parcial a lo largo del año, anunciado en octubre del 2011.
Fuentes: http://www.listindiario.com