Enero: clave en caso Caamaño
La familia del coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó encaminará a
partir de la segunda semana de enero de 2013 las gestiones para llevar a
la justicia a quienes son señalados como los responsables del asesinato
de quien también fuera presidente de la República en Armas, durante la
guerra de abril de 1965.Así lo informaron por separado a elCaribe el
hijo mayor del coronel Caamaño Deñó, Alberto Caamaño Acevedo, desde La
Habana, Cuba, y el teniente coronel del Ejército y subdirector del
Centro de Operaciones de Emergencias (COE) Francis Caamaño Acevedo,
quienes dijeron que se hace necesario someter la osamenta que se
encuentra en el Cementerio Nacional de la avenida Máximo Gómez a una
prueba de Ácido Desoxirribonucleico (ADN) para autentificar si son los
restos de su padre y los que, a su vez, serían elementos de prueba para
la acción judicial.
Alberto reveló que para el día 8 de enero viajará desde La Habana,
donde se desempeña como ministro consejero de la embajada de República
Dominicana, para definir con los demás miembros de la familia y el
cuerpo de juristas, instituciones y personalidades que se han ofrecido a
contribuir, todo lo relativo a la conformación de una comisión de la
verdad y a la apertura del proceso, pasos que, según Francis, ya la
familia ha ido adelantando.
“Abrir el proceso significa definir una serie de cosas, como reunir
los elementos de pruebas, los testigos, determinar a qué personas se va a
someter, a fin de que un proceso de esa naturaleza tenga éxito y sirva
para que se abra la puerta a otros expedientes, como es el caso del
asesinato de las hermanas Mirabal (Patria, Minerva y María Teresa),
cuyos asesinos aún se pasean por ahí por las calles de Santo domingo”,
observó Alberto.
“Ha pasado ya, hay casos que nunca se pensó en que se haría justicia y
se ha hecho: ahí están los casos de Chile, de Uruguay, de Argentina, ¿y
por qué en nuestro país no se puede?, nuestra familia iniciará el
proceso y vamos a tener éxito”, subrayó.
Expresó que la familia del coronel Caamaño Deñó siente el apoyo que
la sociedad dominicana le ha dado y cree que ha llegado el momento de
iniciar un proceso que aclare los pormenores de la muerte del coronel
Caamaño Deñó y “que la justicia caiga con todo su peso sobre sus
asesinos materiales e intelectuales”.
ADN negativos
Mientras que Francis Caamaño Acevedo dijo que la prueba de ADN es
necesaria debido a que las hechas por los familiares de Heriberto Lalane
José y Alfredo Pérez Vargas a las osamentas que, supuestamente era de
éstos, resultaron negativas, “además de que Hamlet Hermann y Claudio
Caamaño, los únicos sobrevivientes, no se ponen de acuerdo, porque
Hamlet dice que los restos lo tiraron al mar y Claudio que fueron
recogidos y llevados al cementerio de la Máximo Gómez, pero tampoco los
que lo mataron dicen nada”.
El ADN contiene instrucciones genéticas usadas en el desarrollo y
funcionamiento de todos los organismos vivos conocidos y algunos virus, y
es responsable de su transmisión hereditaria.
Lalane José y Pérez Vargas cayeron junto a Caamaño el 16 de febrero
de 1973 en Nizaíto, San José de Ocoa, 13 días después del desembarco
guerrillero del día 3 del mismo mes, junto a Ramón Euclides Holguín
Marte, Hamlet Hermann Pérez, Mario Nelson Galán Durán, Claudio Caamaño
Grullón, Juan Ramón Payero Ulloa y Toribio Peña Jáquez. Sobreviven
Hamlet Hermann y Claudio Caamaño.
Proceso judicial
De acuerdo con Francis, la familia Caamaño ha estado manejando el
tema de crear una comisión de la verdad que establezca las
circunstancias que rodearon la muerte del “Coronel de Abril”, ya que
entienden que “se trató de un asesinato, de una violación a los derechos
humanos y una violación a la Convención de Ginebra de 1949 que manda
respetar la integridad física, moral y la vida de los prisioneros de
guerra o conflictos internos”.
“El mismo hecho de desaparecer los restos es otro crimen, según la
Convención de Ginebra”, pues lo correcto era que se entregara a sus
familiares, pero no, ellos ordenaron que lo quemaran y desaparecieran y
eso es un crimen igual”, dijo. Al respecto, se preguntó por qué el
expresidente Joaquín Balaguer, ni los jefes militares de entonces (Ramón
Emilio Jiménez, Juan René Beauchamps Javier y Enrique Pérez y Pérez) no
entregaron el cadáver a la familia cuando ésta así lo solicitó por vía
del padre del coronel Caamaño Deñó, general Fausto Caamaño Medina.
En ese sentido, dijo que “Alberto viene a integrarse a esos pasos que
ya hemos adelantado, él viene a eso, porque es un proceso bastante
largo y complejo y hay que desarrollar todo un proceso investigativo y
él viene a incorporarse a eso”.
El coronel
En 1965 el coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó encabezó la
revolución constitucionalista que buscaba la vuelta al poder del
profesor Juan Bosch, derrocado por los militares el 25 de septiembre de
1963. Bajo el fragor del combate y enfrentando las tropas invasoras de
los Estados Unidos, que pretendían evitar el triunfo revolucionario,
Caamaño Deñó fue proclamado Presidente Constitucional de la República,
cargo que ocupó hasta el 3 de septiembre.
Tras la revolución del 65, Camaño Deñó partió hacia Europa en
condición de diplomático, cargo al que renunció para irse a Cuba, donde
entrenó y preparó una expedición guerrillera para derrocar la dictadura
ilustrada de Joaquín Balaguer, que encarnaba la continuación del régimen
de Rafael Leónidas Trujillo y los sectores políticos y militares que
derrocaron a Bosch.
Desembarcó en playa Caracoles, Azua, el 3 de febrero de 1973, junto a
otros 8 compañeros, siendo capturado 13 días después. Versiones de
Hamlet Hermann y Claudio Caamaño, así como otros exmilitares, Balaguer
ordenó el asesinato de Caamaño, tarea encomendada al comodoro Ramón
Emilio Jiménez, quien a su vez instruyó desmembrar, quemar y desaparecer
el cuerpo del militar.
El procurador “estudiará el caso de Caamaño”
Ante la iniciativa de los familiares del coronel Francisco Alberto
Caamaño Deñó, de gestionar y realizar consultas legales para someter a
la Justicia a los responsables de su muerte, el procurador general de la
República, Francisco Domínguez Brito, dijo ayer que “estudiará el
caso”.
A través del departamento de comunicaciones de la institución, el
magistrado agregó que no ha recibido ninguna solicitud formal por parte
de los familiares del expresidente de la República. Domínguez Brito no
dio más detalles sobre su decisión.
Fuentes: http://www.elcaribe.com.do